Reto 3. Programa de ciudades y comunidades amigables con las personas mayores

La administración nacional, a través del IMSERSO, lidera y coordina junto a las administraciones locales una iniciativa promovida por una Agencia de NNUU, la OMS. En 2005 fue concebido el proyecto y desde la firma del Convenio con IMSERSO en 2007 se viene actualizando, siendo la última actualización en 2022. El objeto es se comprometerse a impulsar esta red que fomenta el envejecimiento saludable y la mejora de las condiciones de vida de las personas mayores.  

La Red de Ciudades y Comunidades Amigables con las Personas Mayores es una iniciativa promovida por la Organización Mundial de la Salud (OMS), que en España es liderada e impulsada por el Instituto de Mayores y Servicios Sociales (Imserso). Su objetivo es abordar el envejecimiento demográfico, contribuyendo a la creación de entornos que promuevan un envejecimiento saludable y activo, faciliten la autonomía personal y no excluyan ni discriminen a las personas a medida que envejecen.

Una localidad amigable con el envejecimiento es aquella en la que las políticas, los servicios y las estructuras relacionadas con su entorno físico y social, se diseñan y reorganizan para apoyar y permitir a las personas mayores vivir dignamente, disfrutar de una buena salud y continuar participando en la sociedad de manera plena y activa.

Una de las claves es la participación de las personas mayores con enfoque transversal y multisectorial. Se valoran ocho ámbitos de trabajo previstas por la OMS.

Se puede decir que las administraciones son agentes emprendedoras en algunos o todos estos ámbitos:             

          

Los ODS sobre los que impacta son muchos. Los emprendedores de estas acciones son los ayuntamientos y coordinados por el IMSERSO en el ámbito de las personas mayores. Es un ejemplo de iniciativa que no podría existir sin el liderazgo de las administraciones públicas.

Es un buen ejemplo de coordinación de políticas y de transversalización, de no dejar a nadie atrás. El diagnóstico de amigabilidad ajustado al pueblo, ciudad de la que se trate tras un proceso que permite crear entornos y servicios que promuevan envejecimiento saludable.

El hecho de que cada municipio haga su diagnóstico es clave para localizar las acciones y entornos a favorecer. Se trabaja con grupos motor compuestos por personas mayores. La participación de la ciudadanía es esencial y habla de metodología bottom-up. Esta iniciativa es ejemplo de que hay Talla unica para todos como habla la Dra. Mazzucato.